Cuando decidí que me iba a presentar, había tener claro una cosa: ser realista.
La primera "realidad" era el tema del dinero. Es inevitable oír eso de ¿por que se gasta el dinero en esto y no en lo otro? ¿por qué gastan el dinero en tontearías?
Dado que hay una legislación especifica para adjudicar obras y contratación asi como de gastos, prácticamente para realizar digamos un proyecto sencillo tarda al menos un par de años y a veces se paraliza definitivamente. Quizás una de las soluciones, menos populares pero no por ello menos efectiva, son los contratos menores. Si, gracias a ellos se puede realizar las coas en tiempo récord, pero su uso ha sido de forma abusiva y de cierta manera muy partidista.
De ahí viene la segunda "realidad": los proyectos que se prometen en los programas políticos. Con cuatro años de legislatura, no se puede prometer cosas que no se pueden realizar en corto espacio, a menos que se tiene pensado estar en la Alcaldía por tiempo infinito. Con poner como ejemplo la construcción de la ciudad de las ciencias, que empezó como anteproyecto en 1991, y empezaron las obras en 1994, se paralizaron las obras en 1996, se modifico el proyecto, reanudaron las obras en 1997 y las obras terminaron en 2005 con la apertura del Palacio de las Artes Reina Sofia: total 14 años.
Hay que ser realistas, hay que realizar proyectos en un plazo de 3 años y medio; y si hay que recurrir a los contratos menores, que sea con sentido común y no con fines partidistas.
Y por supuesto, no empezar proyectos a pocos meses de elecciones para después no terminarlas, solo porque así se obtiene el voto.
Por supuesto, es solo mi opinión y mi punto de vista.
