de Quant Alcalde (parte 2): Una Visión General Sobre Mis Propuestas (que no programa)

  Continuando la serie de artículos sobre mi candidatura, iniciado con este artículo, hoy trataré sobre mis propuestas en general.

  Mis propuestas se basan en tres puntos fundamentales:

   Punto Uno: todas las propuestas están de acorde con los 3 principios del PSOE:

a) Libertad para que toda persona pueda llevar a cabo su proyecto personal de vida.
b) Igualdad de condiciones para que todas las personas puedan desarrollar sus capacidades y potencialidades; y
c) Solidaridad para que todas las personas tengan aseguradas sus necesidades básicas.

  Este punto siempre ha sido para mi el mas importante. Si no se tuviera cuenta, los demás puntos carecen de sentido.

   Punto Dos: las propuestas están  de acorde con la Ponencia Política Aprobada, e incluso ir mas alla de lo establecido, para poder cumplir con los principios del PSOE ya citados .Mis propuestas, aunque parezca increíble de creer,  están en la línea de la ponencia política del PSPV-PSOE Valencia Ciudad (que se aprobara en los primeros días de Abril), e incluso da un paso mas hacia adelante, y aportando propuestas con vista a solucionar de forma sencilla los diversos problemas existentes y para prevenir posibles situaciones futuras que no se contemplen ni que se pueda imaginar, y siempre anteponiendo la solidaridad como denominador común. Que una cosa sea improbable de ocurrir no significa que es imposible de ocurrir. Un ejemplo claro es el brote del Covid-19 en 2020. Las soluciones no son fáciles de poner en marcha, ya que hay que dedicar recursos económicos para poder ejecutarlos. 

  Punto Tres: escuchar a la gente y tomar notas, siempre con valentía, para poder hacer propuestas. ¿Por qué? Porque una persona por sí no puede imponer sus propias propuestas (y por ende, su visión de como han de ser las cosas) en su totalidad. Ni tampoco un grupo concreto, por muchos expertos en la materia hay. Hay que escuchar y saber lo que la Ciudadanía quiere realmente. Se puede emplear métodos diversos para saber que es lo que quiere la Ciudadanía, sin pasar por filtros "de interés" (entiéndase grupos organizados con una tendencia sociopolítico o intereses económicos concretos). No hay que tener miedo de aceptar la aportación de las demás personas, aunque no sean de nuestra ideología, porque a veces nos muestra que hay un problema por resolver o que hay un objetivo común. Porque es mas que posible que varias personas tengan un objetivo común, pero la manera de conseguirlo difiere. La cuestión es llegar un consenso para lograr ese objetivo, con la mente puesta para mejorar la Calidad de Vida que beneficia al Ciudadano, no para obtener beneficios o réditos políticos de forma individual (o como partido). Es como ir del punto A al punto B: qué camino hay que coger si hay varias que llevan al punto B, qué método de transporte hay que utilizar o qué hora es la mejor para salir del punto A. 

  Pero ojo, no es lo mismo aplicar una política Social (como subvenciones por ejemplo) que regular el día a día de la ciudad (mantenimiento, limpieza). Pongamos como ejemplo cambiar una bombilla. Porque cambiar una bombilla de una farola, no es una cuestión de ideología. Porque la ideología política no tiene cabida cuando se trata del mantenimiento de la ciudad. Que hay partidos políticos que estén en contra de las políticas del partido gobernante (que las hay) no les da el derecho de tener la patente de corso para paralizar el funcionamiento de la ciudad (ni de la nación). Hay que sentarse, escuchar, negociar y llegar a un punto donde el consenso es posible de cumplir. Ceder para llegar a un punto en común no significa una rendición, pero ceder aceptando lo que la otra parte impone, es una derrota.

  Pero con voluntad , tesón , convicción , escuchando a los demás , y  siempre de acuerdo con la ponencia política que se aprobará el próximo fin de semana, se puede solucionar casi todo . Y digo casi todo porque surgirán nuevos problemas y retos que no se espera. 

  Pero antes, hay que empezar los ya aprobados y terminar los existentes antes de proponer nuevos proyectos. Porque es muy fácil prometer en un programa político unas obras sabiendo de antemano que no se pueden realizar.

  Esto es todo por hoy. ¡Hasta la próxima entrada!